La interpretación del patrimonio es una actividad relacionada con los procesos de difusión del patrimonio cultural que ha ido ganando notoriedad en los espacios académicos e institucionales. Entendida por la Carta de ICOMOS para la Interpretación y Presentación de los Sitios del Patrimonio Cultural (2008) como el repertorio de actividades realizadas con el objetivo de aumentar la conciencia pública y el conocimiento de los sitios del patrimonio cultural, la interpretación se ha aplicado a los sitios culturales desde la década del 80. , pero en el campo teórico, los fundamentos y metodologías de interpretación aún no están bien establecidos.
En este escenario, lo que ocurre es la confusión y superposición de conceptos, metodologías y objetivos de interpretación con los de otras disciplinas. Las consecuencias de este problema repercuten más allá de la literatura específica sobre interpretación del patrimonio, influyendo en el enfoque – superficial y en ocasiones ineficaz – dado a la interpretación para la preservación del patrimonio.
En este texto, destacamos específicamente la superposición conceptual que existe entre la interpretación del patrimonio y la educación del patrimonio en el contexto nacional. Esta superposición se destaca porque, incluso con una búsqueda rápida de obras que utilizan los términos “educación patrimonial” e “interpretación patrimonial”, muestra que estos términos a menudo se usan indistinta o inseparablemente.
El enfoque más común de las obras que traen este uso de términos es que tanto la interpretación como la educación patrimonial son instrumentos de valoración del patrimonio, que utilizan técnicas e instrumentos como medios impresos, paneles informativos y visitas guiadas en iniciativas continuas que pueden o no ser asociados con el proceso de educación formal. Con este enfoque, resulta imposible diferenciar un concepto de otro y no hay espacio para reflexionar sobre por qué es importante diferenciar estos dos conceptos.
Si bien la interpretación y la educación patrimonial comparten características teóricas y metodológicas comunes, se refieren a dos actividades diferentes. Con base en la definición traída por la Carta de ICOMOS para la Interpretación y Presentación de Sitios del Patrimonio Cultural (2008), traemos la Política de Patrimonio Cultural Material (PPCM) establecida por IPHAN en 2018, que establece la interpretación del patrimonio y la educación del patrimonio como dos etapas distintas de la proceso de conservación del patrimonio. Según la política, la educación se refiere a la primera etapa del proceso, con el objetivo de promover el reconocimiento y valoración de las identidades comunitarias utilizando el patrimonio como instrumento para acercar estos referentes culturales, buscando generar canales de diálogo entre las instituciones patrimoniales y la sociedad y el Integración efectiva de la comunidad en todas las etapas del proceso de conservación. La interpretación, en cambio, denominada difusión en el PPCM, es la última etapa del proceso de preservación, con el objetivo de colectivizar información y contenidos relacionados con los bienes culturales bajo la tutela del Estado (IPHAN, 2018).
La interpretación no tendría el mismo rol de articulación social e institucional que la educación patrimonial, pues se asume que estos vínculos ya existen debido a las acciones educativas iniciales. Este aspecto ilustra bien la razón de la jerarquía de las etapas del proceso de conservación que coloca el PPCM.
Así, este traslape teórico se produce en detrimento de los fundamentos tanto de la educación como de la interpretación patrimonial, dando lugar a la proliferación de estudios que tratan nominalmente estos temas, pero que sustancialmente no utilizan las bases teóricas y metodológicas de ninguno de los dos, ni ¿Apuntan a lograr lo que establecen sus principios individuales?
Da la casualidad de que, más que un problema académico, la calidad intercambiable que la educación e interpretación del patrimonio adquirieron en Brasil puede reflejarse en el apoyo del IPHAN a la creación de centros de interpretación y casas patrimoniales. Ambas actividades se limitan a aplicar instrumentos similares, unificándolos en forma de una comunicación patrimonial que debe realizarse en un lugar creado específicamente para tal fin. Esto no quiere decir que la existencia de centros de interpretación y casas patrimoniales sea inválida como iniciativa de educación o difusión del patrimonio, sin embargo, es necesario reconocer que el enfoque casi exclusivo en la aplicación de dos instrumentos muy similares para dos actividades muy diferentes – tal como lo define el propio PPCM, puede ser más que una mera coincidencia, ya que es sintomático de una superposición conceptual, metodológica y práctica entre la educación del patrimonio y la interpretación realizada incluso por las propias agencias de protección.
Victoria de Azevedo Braga Tatini
Referencias
INTERNATIONAL COUNCIL ON MONUMENTS AND SITES. Charter for the interpretation and presentation of cultural heritage Sites. Québec, 2008. Disponível em: <https://www.icomos.org/charters/interpretation_e.pdf.>. Acesso em: 11 jun. 2021.
INSTITUTO DO PATRIMÔNIO HISTÓRICO E ARTÍSTICO NACIONAL. Portaria nº375, de 19 de setembro de 2018. Institui a Política de Patrimônio Cultural Material do Iphan e dá outras providências. 2018. Disponível em: <http://portal.iphan.gov.br/uploads/ckfinder/arquivos/PORTARIA%20375%20%202018%20-SEI_IPHAN%20-%200732090.pdf>. Acesso em: 22 jul. 2021.
Como citar:
TATINI, V. A. B. La interpretación del patrimonio no es educación patrimonial: superposiciones teóricas y prácticas. Proyecto Memoria Ferroviaria. 2021. Disponible en: https://memoriaferroviaria.rosana.unesp.br/?p=4067&lang=es
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